Playa, brisa y mar, ¡ou seh! (San Andrés y detrás de las palmeras Johnny Cay, desde el Hotel El Dorado)
Hola,
Bueno, aprovechando que hoy es domingo, no tengo ganas de leer nada de maestría, nada que termina el torrent que estoy bajando y pues aún no son las 12, escribo otro post para contarles una breve actualización de estos cuatro meses…
– Sigo trabajando en la misma parte en el mismo cargo. En diciembre recibí el botón de los 5 años de estar trabajando allá. Ya soy oficialmente activo fijo de la U 😛
– Empecé tercer semestre de maestría junto con las clases finales de dos materias del semestre pasado (que por vagancia no las vimos en diciembre). Por ahora todo marcha viento en popa, excepto el proyecto de grado que ya toca empezar a definirlo y hasta ahora no hay nada concreto :-S
– Me pasó otra vez lo de este post (lo de los zapatos diferentes), con el agravante que en esta ocasión un zapato era negro y otro café (imposible de disimular). Afortunadamente me di cuenta en el carro antes de dejar a mi papá en la empresa, así que tocó devolverse a la casa y cambiarse el zapato. No me imagino cómo se habría reído la gente de mí cuando me hubiesen visto entrando a la oficina con dos zapatos totalmente distintos 😛
– Vino mi hermana de visita con el cuñado y nos fuimos de paseo para San Andrés, después de 18 años desde la última visita. Pa’qué, está bastante cambiado (como obvio después de tanto tiempo ¿no? 😛 ), se pasó bueno, se descansó, se tomó coco loco en forma, se comió bueno en el restaurante y hasta hubo tiempo para amanecer malito del trago del día anterior 😛 Lo único malo del viaje fue que se acabó 🙁
– ¿El corazón? Bien gracias. Nada en el horizonte por el momento 🙁
– La semana pasada (el domingo 18) me atropelló un carro. Bueno, de hecho no fue atropellada, más bien fue como un «empujón», pero igual me alcanzó a mandar al suelo. Gracias a Dios no pasó de un esguince en el tobillo izquierdo, unos raspones mínimos y la camiseta de los domingos rota en la parte de atrás 😛 Yo me había bajado momentos antes a la calzada debido a que había una venta de empanadas en la acera (aunque realmente acá en el pueblo todos caminamos por la vía, esta vez tenía excusa :P) y el tipo que iba manejando estaba tomado (y según él iba escopolaminado, pero en fin). Menos mal la cosa no pasó a mayores, me dieron dos días de incapacidad (domingo y lunes) y aproveché para hacer las vueltas del cambio del módem y descansar 😛
– Mmm… creo que nada más 😛
En fin, como lo digo cada que escribo por acá, espero no abandonar el chuzo por mucho tiempo 😛 Gracias por el pasoncito por estos lares 🙂
¡Saludos!
– Andrés M.