Hola!
Desde hace tiempo tengo esta imagen guardada en el escritorio, pensando en un post para subirla al blog (y para aprovechar a quitar las telarañas de por acá jeje). Me gustó la imagen y me hizo pensar que a veces he juzgado mal a las personas por no entender el hecho que relata esta imagen, que todos llevan una vida tan compleja como la propia y que eso hace que sus decisiones y motivaciones sean totalmente diferentes a las que uno espera/quiere/piensa. Sí, es algo que parecería obvio, pero bueno 😛
De igual manera, es sorprendente esa transición entre esa «ventana iluminada en la oscuridad» y convertirse en esa persona especial en la vida de alguien más (o en la de uno mismo). Aunque no crea estrictamente en el destino (creo que finalmente uno se lo forja), creo que algunas «casualidades de la vida» existen y te cambian la vida para bien (o para mal)… el hecho de cambiar un día de ruta o decidir caminar más lento o más rápido, puede significar el inicio de una cadena de sucesos que pueden llevarte a conocer el «amor de tu vida», o que finalmente no lo conozcas. Eso es lo bonito del azar.
En fin, tenía este pendiente desde hace rato, y quería desempolvar esto por acá y hacer ping 🙂 Si todavía hay alguien que pase por aquí, saludos!
– Andrés M.